Hace tiempo que quería leerme este libro, concretamente desde que un amigo me habló de él hace ya más de dos años. Yo acababa de sacar El cuarto jinete y la mayor parte de la gente elogiaba, o por lo menos se mostraba sorprendida, por la voz narrativa que había decidido utilizar en mi primera novela. Sé que no había inventado nada nuevo, de hecho en todas las entrevistas que hice en aquella época dije que lo de hablar directamente al lector (romper la cuarta pared en teatro) lo había sacado de Casa negra, el libro de Stephen King y Peter Straub.
El caso es que un amigo me habló de Demonio de libro porque también hablaba directamente al lector… aunque de otra forma. Y me picó el gusanillo. Y por fin le he puesto solución. Demonio de libro te habla, sí. De hecho, empieza pidiéndote que quemes el libro. Te lo suplica, te lo ruega, te lo pide una y mil veces… porque lo que estás a punto de leer no es un libro cualquiera… el volumen que tienes entre las manos es un demonio que ha quedado atrapado entre esas páginas, condenado a ser tinta y papel, y que ruega que le des fin a su existencia.
Y como es de suponer que no lo harás… el demonio se resigna y acaba contándote su vida y el cómo acabó atrapado entre las páginas del libro… no sin pedirte por el camino un par de docenas de veces que le prendas fuego. Y lo hará apelando a tu compasión, amenazándote de muerte, rogándotelo, ordenándotelo… el demonio que habita esas páginas se muestra de esa manera como un ser voluble y lleno de matices.
La historia que cuenta, la de su vida, es más irregular. A mi modo de ver, en ocasiones peca de infantilismo, o de excesiva sencillez. Y sin embargo, no deja de ser una lectura interesante, inmersiva, con algunos guiños históricos bastante curiosos. Miedo da poco, la verdad, pero no estoy muy seguro de que Barker pretendiera dar miedo con esta novela. Si lo consigue, desde luego no es con la historia del demonio sino más bien con esos tramos en los que te habla de tú a tú, cuando su personalidad cambia de ser un ser patético y encerrado a alguien lleno de odio y malvado.
Es un libro corto que se lee en unas cuantas sentadas, con un personaje principal bien hilado (porque en realidad esos aparentes cambios de personalidad casan a la perfección con ese ser demoníaco) y que incluye amistad, aventuras y hasta política entre cielo e infierno. Y una revisión de la historia tal y como la conocemos respecto a uno de los inventos claves de la humanidad. Y hasta aquí puedo leer sin entrar en spoilers.
Y ahora, quema esta reseña. Te lo ruego.